En todo el mundo hay un sinfín de países que solicitan a los turistas extranjeros una visa para poder entrar. ¿Qué es una visa y cómo conseguirla?
No se preocupe, pues no es un bicho de siete cabezas! Una visa es tan sólo un documento entregado por las Embajadas o Consulados del país de su destino del viaje. Ese documento es como una especie de certificado, indicando que el turista tiene todas las condiciones exigidas por el país de destino para entrar al mismo.
De acuerdo al tipo de viaje, existen diversas visas y aquí citaremos algunas de las más importantes o comunes:
1. La VISA DE TURISTA es la más común entre todas. Tiene una validez desde 30 hasta 90 días de permanencia en el país elegido para su viaje.
2. La VISA DE ESTUDIANTE sólo es válida para aquellas personas que viajan por intercambio estudiantil o para realizar, comprobadamente, cursos de estudios en el exterior.
3. Ya la VISA DE COMERCIANTE sirve para aquellas personas que viajan por negocios.
La elección del tipo de visa, evidentemente, dependerá de las exigencias y leyes del país de destino, que varían de país a país.
¿Cómo conseguir una visa?
Es muy sencillo: deberá ser poseedor de un pasaporte válido y en vigencia. En realidad es un trámite fácil, pero sucede que en algunos casos, como por ejemplo con los Estados Unidos de América, la persona que lo atienda en la Embajada o Consulado pueda negarle la visa. No es por un mero capricho: sucede que cuando se pide una visa de ‘no inmigrante’, se debe demostrar que se regresará al país de origen. Es una forma de evitar a los clandestinos.
Todos los trámites para poder solicitar y luego obtener una visa se realizan únicamente en las Embajadas o Consulados correspondientes a los países hacia donde se irá.